Mi vecindario, nuestro mundo, grupo de vinculación Masaya Leicester, Leicester, Reino Unido.
El Fondo de Innovación para el Aprendizaje Comunitario (Community Learning Innovation Fund – CLIF) aportó fondos provenientes de la Agencia de Financiamiento de Habilidades (Skills Funding Agency) para financiar 96 proyectos de aprendizaje comunitario que se llevaron a cabo en toda Inglaterra entre septiembre de 2012 y julio de 2013. El objetivo de los proyectos era empoderar a adultos, en especial a aquellos social y económicamente desfavorecidos, para mejorar la calidad de vida propia, al igual que la de sus familias y comunidades. Mediante la formación de nuevas asociaciones y la aplicación de una amplia gama de enfoques creativos, los proyectos CLIF comprometieron la participación de más de 15.000 alumnos, muchos de los cuales pertenecían a algunos de los grupos más afectados por la exclusión y con menos posibilidades de participar en el aprendizaje.
El proyecto de Enfoque Inclusivo para el Desarrollo Conjunto y la Implementación de una Comunidad (Inclusive Co-development and Implementation of a Community – ICICLE) tenía por objeto reducir la exclusión digital de personas con discapacidades de aprendizaje. Para ello se valió de una plataforma de aprendizaje multimedia desarrollada en forma conjunta, que empleaba imágenes, videoclips y audioclips para incorporar al proceso de enseñanza a personas que de lo contrario permanecerían excluidas debido a sus dificultades para leer o escribir.
El proyecto se concentró en determinar la combinación adecuada entre tecnologías y enfoques de enseñanza y aprendizaje. De este modo se permitiría que alumnos afectados por diversas discapacidades identificaran objetivos específicos, adquirieran conocimientos y percepciones de los pares, maestros y voluntarios, hicieran planes en conjunto para alcanzar sus objetivos, y adoptaran medidas para participar más activamente en sus comunidades.
De los 116 alumnos participantes, 44 eran adultos con discapacidades de aprendizaje, 25 pertenecían al personal de apoyo y al cuerpo docente, y los restantes 46 eran estudiantes de pregrado voluntarios. Los participantes emplearon la plataforma para fijar y planificar las metas. También elaboraron círculos de apoyo eficaces que los ayudaran a alcanzar sus objetivos personales. Gracias a ello aumentó su grado de inclusión social y digital, al igual que su tasa de empleabilidad.
El personal de apoyo desarrolló itinerarios de aprendizaje en conjunto con los alumnos, además de planificar líneas de acción y elaborar repertorios de recursos virtuales que compartieron con los estudiantes.
El uso de recursos multimedia permitió que cada participante diera a conocer sus preferencias e intereses, superándose así los obstáculos con que suelen encontrarse las personas con discapacidades asociadas al habla, el lenguaje y la comunicación. La colaboración entre los participantes y los estudiantes de pregrado voluntarios fue provechosa para todos los interesados y creó un clima propicio para que las personas con discapacidades de aprendizaje entablaran amistades fuera de su círculo social habitual.
Algunos adultos con discapacidad de aprendizaje eran escogidos especialmente para oficiar de “promotores de una causa” y de mentores de sus pares, y para encargarse además de dar a conocer el proyecto y sus logros a los visitantes y a los funcionarios recién incorporados. Los tutores, el personal de apoyo y los estudiantes voluntarios apoyaron a los participantes con discapacidades en su esfuerzo por alcanzar objetivos personales, que fueron desglosados en tareas viables. Para cada tarea los participantes podían encomendarse a la ayuda de auxiliares virtuales, mientras que las experiencias y el progreso eran registrados en diversos formatos digitales e incorporados en el perfil de cada persona.
Los voluntarios acompañaron a los participantes durante visitas sobre el terreno a sus comunidades para reunir material e información. Sobre la base de ese corpus fue posible crear un sitio web en el que se dieron a conocer las oportunidades y los servicios disponibles a nivel local para personas con discapacidades de aprendizaje.
Para mayor información
Proyecto ICICLE en versión compacta: http://bit.ly/1ndDGLg
Rix Centre: http://www.rixcentre.org/;
Contacto: Andy Minion (A.T.Minnion@uel.ac.uk)
“Mi vecindario, nuestro mundo”, fue un proyecto comunitario intergeneracional cuyo objetivo era congregar a los habitantes de zonas desfavorecidas de Leicester para explorar su sentido de identificación y de pertenencia con respecto a su propio vecindario y a la ciudad en general. También generó una percepción de la diversidad y la sostenibilidad al conectar la vida cotidiana con temas más generales de relevancia mundial.
En los talleres se analizó de qué manera la alimentación contribuye a la salud y el bienestar, quiénes intervienen en el ciclo de la alimentación desde el cultivo hasta el producto final, y de qué manera los alimentos que consumimos repercuten en los productores y en nuestro medio ambiente. Asimismo, los participantes compartieron sus recetas favoritas y sus consejos sobre alimentación, y de paso descubrieron cuál es el papel que cumplen los alimentos en las celebraciones de todas las culturas.
Gracias al apoyo que se les prestó, los participantes lograron adquirir una serie de aptitudes transferibles, entre ellas el trabajo en equipo y capacidades de organización y presentación, que pusieron en práctica durante el evento final de exhibición: el “Festival comida, gloriosa comida”. Este consistió en una jornada plena de actividades asociadas a la alimentación, entre las que se incluyeron exhibiciones y demostraciones, degustaciones de comidas típicas (desde la de Leicester hasta la de India, Nicaragua y el Caribe), al igual que siembras y preparación de batidos de frutas, que los participantes ayudaron a desarrollar y a poner en práctica. El evento tuvo lugar durante la Semana del Alumno Adulto y ofreció una ocasión para que los participantes dieran a conocer lo que habían aprendido gracias al proyecto.
Los beneficios del proyecto fueron apreciados por más de 200 personas de todas las edades que asistieron a las sesiones de degustación y al evento de exhibición final. El éxito del proyecto se debió a que:
Para mayor información
Proyecto Mi vecindario, nuestro mundo (My Neighbourhood – Our World) en versión compacta:
http://bit.ly/1sTbbHQ
Leicester Masaya Link Group: www.leicestermasayalink.org.uk
Contacto: Claire Plumb LMLG@leicestermasayalink.org.uk
Authora
Sarah Perry, Responsable de Proyectos de Aprendizaje en Comunidades, NIACE,
sarah.perry@niace.org.uk